Consejos para el cuidado del pelo largo

Tanto tiempo dejándote crecer el pelo y ahora sientes que tienes una peluca de paja. Llevar el pelo largo requiere de mucho más que paciencia para verlo crecer. Conoce la manera de tener el mejor pelo y ser la envidia de tus amigas.



El número uno entre los problemas que afectan al pelo largo es la rotura, que se presenta, a menudo, en forma de mechones rebeldes, puntas resquebrajadas, y que otorga un aspecto de menor longitud general. Desde el momento que te levantas hasta el momento que te vas a dormir, e incluso mientras duermes, existen varios factores que te pueden conducir al rompimiento del cabello.



Una de las causas más comunes es el mal mantenimiento, destacándose el cepillado y lavado inapropiados y el recorte poco frecuente. Asimismo, factores concernientes al estilo de vida, tales como una nutrición pobre, estrés y falta de descanso, pueden la dañar tu cabello.



No obstante, la situación se ve agravada por el hecho de que muchas de las cosas que las mujeres consideran saludables para su cabello, en realidad, pueden estar dañándolo. Pero no te preocupes; empleando unas simples clínicas de cuidado y usando los productos de mantenimiento correctos, cualquiera puede tener un pelo largo, hermoso y saludable.



UN PELO LARGO ESPLENDIDO



Barrida manual



En primer lugar, mientras te estés despertando efectúa un barrido manual. Apoyando las manos sobre la cabeza, recorre la cabellera con tus dedos para remover enredos y marañas.



Cepillado apropiado



Antes de comenzar el cepillado, inclínate hacia delante dejando que el pelo caiga. Utilizando un cepillo de madera con cerda natural, cepilla el cabello desde la nuca, pasando por la cabeza, y llegando hasta las puntas. A continuación, párate derecha, dejando caer el pelo naturalmente, y cepilla desde la superficie que está debajo (lo oculto del cabello, pegado al cuero cabelludo), abarcando los mechones y llegando a las puntas. Ahora, cepilla las capas superiores con movimientos suaves y largos. Luego de cada movimiento, allana el pelo con tus manos para reducir la estática. Incrementa el número de pasadas semanalmente, comenzando con cinco y aumentando una a la semana, hasta que sientas que has encontrado una rutina confortable. Si sientes que se desarrolla oleosidad, reduce las pasadas.



Cepíllate sólo con el pelo seco. Cuando el pelo se encuentra mojado o húmedo, presenta mayor susceptibilidad, y el cepillado puede dañarlo con facilidad. Aún cuando el pelo esté seco, pásate un peine antes de cepillarte.

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